En el mercado podemos encontrar múltiples alternativas para exprimir al máximo nuestros títulos de simulación de conducción favoritos. Gran Turismo o Forza Motorsport se disfrutan mucho mejor con un buen volante con su cambio de marchas y pedales incluídos, o un par de pantallas extra para tener una mejor visión panorámica.
Pese a todo, es muy difícil llegar a tener la sensación de estar pilotando un vehículo de verdad. La inercia al acelerar no te empuja contra el asiento, la respuesta del volante no es la misma por bien implementada que esté y la visión de la cabina no es creíble si tenemos la foto de nuestra primera comunión al lado de la tele.
Por eso hay gente que busca llevar al máximo la experiencia jugable, hasta el punto de crear un curioso periférico que podría ser el simulador más real del mundo. ¿Acaso hay algo que simule mejor la conducción que un coche de verdad?
Eso mismo debieron pensar este grupo de "geeks" finlandeses al conectar directamente su PC a este Volkswagen Scirocco. Con unas cuantas líneas de código y un proyector, han logrado crear una experiencia de juego absolutamente inmersiva.
La ventaja del modelo Scirocco de VW es que el coche ya incorpora todos los sensores y la electrónica necesarios para leer desde un ordenador los giros de volante, cambios de marcha y presión en los pedales. Una tecnología pensada para ayudar en la conducción, pero que ha sido aprovechada para convertir un coche real en el mejor mando posible para un juego de carreras.
El fruto de su trabajo salta a la vista. Contemplad el siguiente vídeo: http://www.youtube.com/watch?v=psAZSPK4pWc&feature=player_embedded
Pese a todo, es muy difícil llegar a tener la sensación de estar pilotando un vehículo de verdad. La inercia al acelerar no te empuja contra el asiento, la respuesta del volante no es la misma por bien implementada que esté y la visión de la cabina no es creíble si tenemos la foto de nuestra primera comunión al lado de la tele.
Por eso hay gente que busca llevar al máximo la experiencia jugable, hasta el punto de crear un curioso periférico que podría ser el simulador más real del mundo. ¿Acaso hay algo que simule mejor la conducción que un coche de verdad?
Eso mismo debieron pensar este grupo de "geeks" finlandeses al conectar directamente su PC a este Volkswagen Scirocco. Con unas cuantas líneas de código y un proyector, han logrado crear una experiencia de juego absolutamente inmersiva.
La ventaja del modelo Scirocco de VW es que el coche ya incorpora todos los sensores y la electrónica necesarios para leer desde un ordenador los giros de volante, cambios de marcha y presión en los pedales. Una tecnología pensada para ayudar en la conducción, pero que ha sido aprovechada para convertir un coche real en el mejor mando posible para un juego de carreras.
El fruto de su trabajo salta a la vista. Contemplad el siguiente vídeo: http://www.youtube.com/watch?v=psAZSPK4pWc&feature=player_embedded
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